Que desconcierto!!!
Mi barbudo marcho a su ciudad natal y solo me quedaron unas pocas comunicaciones telefónicas, algunas cartas y hermosas melodías tangueras que el sabe que yo disfrutaba. También algún que otro poema del gran Borges como "Despedida" el cual dice asi:
Entre mi amor y yo han de levantarse
Trescientas noches como trescientas paredes
Y el mar será una magia entre nosotros.
No habrá sino recuerdos.
Oh tardes merecidas por la pena,
Noches esperanzadas de mirarte,
Campos de mi camino, firmamento
que estoy viendo y perdiendo…
Definitiva como un mármol
Entristecerá tu ausencia otras tardes.
Después de leer estas palabras que encerraban menuda añoranza y de llorar por mi amado que hace tanto no veía, me preguntaba, ¿Por que no viene? ¿Por que no esta aquí a mi lado? ¿Por que tan lento? o será puro cuento argentino!!!
Para colmo me recomendó ver "El lado oscuro del corazón" y con esto termino de asesinarme.
Apareció el próximo año y no pudimos contener nuestras lagrimas y nuestro sufrimiento en aquel encuentro, pero en ese momento comprendí que eran los dichosos mangos de los que hablan los argentinos y la falta de ellos a lo que conlleva.
2 comments:
Lo de los mangos quedo claro pero y los elefantes? Era por lo lento no? Katana
Claroooo!!!Despues de lo del principio, es lo menos que esperaba que fuera.
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